Personal del INTA Concordia, a través del programa Prohuerta los acompañó en esta iniciativa que incluyó capacitaciones sobre higiene, cuidados generales, lavado de manos y aspectos técnicos de la instalación de filtros: características, componentes, funcionamiento y mantenimiento.
Como didáctica para los niños se preparó un microscopio en el que pudieron reconocer las bacterias que pueden estar presentes en el agua y se dispuso de un espacio para que realicen dibujos alusivos a la temática del encuentro.
Estos purificadores de agua tienen un alto volumen de almacenamiento incorporado y su uso permite la prevención de enfermedades transmitidas por virus, bacterias y parásitos. Su vida útil ronda en 70.000 y 10.000 litros de agua.